La marca italiana incorpora nuevas soluciones para vehículos premium, fabricadas con materiales de alta resistencia.
Magneti Marelli Parts & Services ha incorporado 54 nuevas referencias de compresores para suspensiones neumáticas a su catálogo de posventa, cubriendo gran parte del parque de vehículos premium equipados con este sistema, especialmente de fabricantes alemanes y británicos. Con esta ampliación, la compañía ofrece recambios para todo el sistema: muelles y amortiguadores neumáticos, así como amortiguadores de aceite-gas.
Compresores para suspensiones neumáticas de alto rendimiento
Según ha anunciado la compañía en un comunicado, fabricados en plantas especializadas, estos compresores se someten a pruebas de resistencia, rendimiento, vibración y choques térmicos —desde 85 °C hasta -40 °C— para garantizar su fiabilidad en condiciones extremas.
Su diseño avanzado reduce el ruido y las vibraciones, y cuenta con protección contra partículas, líquidos y microorganismos, cumpliendo con los estándares de los fabricantes de equipo original (OEM).
Materiales y configuraciones disponibles
La gama se presenta en el característico embalaje amarillo y azul de la marca, con el logotipo grabado con láser como garantía de autenticidad. Se ofrecen distintas configuraciones, desde versiones con soporte de montaje hasta kits completos que incluyen válvulas, cableado, relés y secador (este último siempre de serie).
En su fabricación se utiliza aluminio fundido a presión (para optimizar la disipación de calor), acero con tratamientos anticorrosión y latón, garantizando durabilidad y alto rendimiento.
Fácil instalación e integración con sistemas de diagnosis
Los nuevos compresores para suspensiones neumáticas están diseñados para integrarse con los principales sistemas de diagnosis del mercado, lo que facilita el trabajo de los talleres. Cada unidad incluye instrucciones de montaje detalladas para acortar tiempos de instalación.
La marca recuerda que, al sustituir un compresor, es esencial revisar el resto de componentes de la suspensión neumática para evitar fallos derivados de fugas u otros problemas que puedan sobrecargar el sistema.
En este tipo de sistemas, el compresor genera y mantiene la presión de aire necesaria para los muelles neumáticos, ajustando la altura y la rigidez de la suspensión según las condiciones de conducción y carga.
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