¿Te gustaría ser chapista? Te contamos qué estudiar para ser chapista o pintor de vehículos.
El parque de vehículos crece año tras año con un avance de la industria de la automoción cada vez más compleja y exigente. Los fabricantes buscan nuevas soluciones tecnológicas que les permitan diseñar coches más seguros y eficientes. Esto, evidentemente, es positivo tanto para los clientes como para la propia industria. Sin embargo, también exige una mayor preparación a los agentes involucrados en el sector, entre ellos los profesionales de los talleres.
Los usuarios demandan servicios cada vez más precisos y personalizados, ya se trate de la recuperación de la carrocería dañada o del montaje y desmontaje de piezas del coche (además del pintado). En consecuencia, la de chapista es una salida profesional que cuenta en estos momentos con una fuerte demanda de trabajadores debidamente cualificados.
Cómo ser chapista o pintor de vehículos
Qué estudiar para ser chapista. La educación más habitual para cubrir esta vacante y obtener conocimientos al respecto es la de optar por la Formación Profesional (FP) y su Ciclo Formativo Grado Medio en Carrocería. Con este ciclo formativo posteriormente se puede acceder a Formación Profesional de Grado Superior en Mecánica y Automoción.
Aunque no hay una titulación oficial de ‘chapista’ este ciclo es la opción que ofrece mayores contenidos relacionados con la propia labor del puesto de chapista.
Ciclo Formativo Grado Medio en Carrocería
Para poder cursar este Ciclo Formativo de Técnico de Carrocería debes tener como mínimo finalizada la ESO o un PFI. Este curso tiene una duración de 2 cursos académicos con un total de 1.617 horas lectivas y 383 horas de prácticas en empresas.
Con este ciclo serás capaz de:
- Reparar elementos metálicos y sintéticos de la carrocería.
- Preparar, proteger y embellecer superficies del vehículo.
- Realizar el mantenimiento de primer nivel en máquinas y equipos.
- Localizar y diagnosticar deformaciones en las estructuras de los vehículos.
- Determinar los procesos de reparación interpretando la información técnica incluida en manuales y catálogos.
- Sustituir y ajustar elementos que forman parte de la carrocería del vehículo, mediante uniones fijas o desmontables.
- Reparar deformaciones de elementos fijos estructurales de la carrocería.
Entre las salidas profesionales están el de chapista reparador de carrocería de automóviles, vehículos pesados, tractores, maquinaria agrícola, de industrias extractivas, de construcción y obras públicas y material ferroviario. También variantes como instaladora o instalador de lunas y montador de accesorios, así como pintor de carrocería de automóviles, vehículos pesados, tractores, maquinaria agrícola, de industrias extractivas, de construcción y obras públicas y material ferroviario.
Ciclo Formativo Grado Superior en Automoción
Por otro lado, también existe la opción de realizar una FP de Grado Superior: la FP de Técnico Superior en Automoción. Esta FP tiene una duración de 2.000 horas divididas en dos años lectivos. En este caso, durante el primer año se aprende todo lo relacionado con electromecánica, y el segundo año se centra más en el aspecto de chapa y pintura.
¿Cuánto gana un chapista?
Al igual que en otros sectores, la remuneración puede variar dependiendo de varios factores y variables como la experiencia, el prestigio del taller o el tipo de contrato. Además, lamentablemente, la zona geográfica donde se trabaja puede influir en la remuneración a fin de mes.
La media en el sector está alrededor de los 21.000 € brutos anuales trabajando a jornada completa (8 horas diarias). Esto supone unos 1750€ brutos mensuales que dependiendo las circunstancias del trabajador podría quedarse entre 1250-1350€ netos mensuales. Si hablamos de un buen chapista con años de experiencia a sus espaldas y trabajando para algún importante taller, la remuneración podría llegar hasta los 35.000 euros brutos anuales.
¿Te animas? Ahora que ya sabes qué estudiar para ser chapista plantéate muy bien tu futuro profesional.
